Poděbrady: mucho más que aguas curativas
Poděbrady se ha considerado desde hace tiempo un destino ideal para una escapada. Esta ciudad balneario no solo ofrece manantiales curativos, sino también una gastronomía de primera, naturaleza pintoresca, monumentos históricos y múltiples atracciones.
Punto de partida: la animada plaza Jiří
El recorrido por la ciudad debería comenzar en el corazón de esta pequeňa urbe, en la plaza Jiří, que conecta el carril bici a lo largo del río Elba con la columnata y el parque del balneario. Si visitas en primavera o verano, te sorprenderá el bullicio del lugar.
Helado legendario: la parada dulce obligada
Frente a la confitería U Reinvaldů, decenas de visitantes hacen fila para refrescarse con su famoso helado. Fundada por Emanuel Reinvald en 1938, la confitería ofrece hasta sesenta variedades de helado artesanal por temporada.
Un castillo con historia y manantial mágico
Muy cerca de la plaza se encuentra el castillo de Poděbrady. Este año se conmemoran 120 años desde que el terrateniente alemán Karl Bülow von Bothkamp descubriera el primer manantial mineral „Poděbradka“ en su patio, usando supuestamente una varita mágica.
El castillo, construido originalmente como fortaleza de agua por el rey Přemysl Otakar II en el siglo XIII, se transformó posteriormente en castillo. Según la leyenda, en 1420 nació aquí Jorge de Poděbrady, único rey checo que no pertenecía a una dinastía real. Sin embargo, esta información nunca se ha confirmado y también se citan como posibles lugares de nacimiento Horažďovice o Kunštát.
Hoy, el castillo alberga la exposición „Monumento al Rey Jiří de Poděbrady“, organizada por el Museo Polabský. El rey también es recordado con una estatua neorrenacentista en la plaza Jiří, diseñada por Bohuslav Schnirch, célebre escultor del Teatro Nacional. Esta estatua ecuestre está considerada un monumento cultural nacional.
Gastronomía de autor en la columnata del balneario
Desde la plaza, se puede caminar hacia el parque del castillo y la columnata. Pero antes, vale la pena detenerse en uno de los establecimientos del Grupo La Place, liderado por el reconocido „gastroemprendedor“ Tomáš Vrba.
Vrba ha abierto ya nueve proyectos en la columnata y sus alrededores, que incluyen una casa de huéspedes en el castillo, panadería artesanal, restaurantes y un hotel. Su éxito ha sido reconocido: dos de sus establecimientos han sido premiados por la prestigiosa guía francesa Gault&Millau.
Café Oliver: elegancia francesa en Bohemia
Uno de los galardonados es el restaurante Café Oliver, situado en el entorno pintoresco de la columnata. Los inspectores destacaron su atmósfera de cafetería francesa, el servicio profesional y su carta refinada. Recomendaciones: tartar de salmón con mango y granada, kulajda (sopa tradicional) y carrilleras de ternera.
Cucina food & wine: el sabor del Mediterráneo en el corazón de Chequia
También fue elogiado Cucina food & wine, otro restaurante del grupo La Place. Los inspectores franceses quedaron impresionados por su cocina italiana y mediterránea, especialmente por sus postres y pastas caseras.
Sabores para todos: otras paradas imprescindibles
Más allá de los proyectos de Vrba, el parque del balneario y sus alrededores están llenos de propuestas gastronómicas. El Café Viola, en plena columnata, ofrece pasteles caseros en un ambiente típico de balneario. Y para los amantes del café, la torrefacción Káva Poděbrady es una visita obligada: allí se puede disfrutar de buen café, bocadillos y repostería artesanal.