La gente está abandonando las ciudades fronterizas. El Ministerio de Desarrollo Regional planea dar ayuda financiera y asesoramiento técnico para evitar una completa desolación.
Según los expertos, la despoblación de algunas zonas es una tendencia que se ha ido manifestando a largo plazo. Esta realidad afecta sobre todo a las ciudades de las regiones fronterizas o del noreste de la República Checa. Mientras que Praga y Bohemia Central registran los mayores índices de crecimiento entre las regiones, la región de Karlovy Vary y la región de Moravia-Silesia son las que experimentan un mayor declive. Sobre todo son los jóvenes los que abandonan esas regiones, la mayoría de las veces lo hacen para trabajar o estudiar en zonas metropolitanas.
La falta de trabajo, infraestructuras y educación son los motivos principales
Falta de oportunidades laborales, infraestructuras deficientes o acceso a la educación. Estas son las razones más comunes por las que la gente abandona algunas ciudades. De las diez ciudades más despobladas, la mitad se encuentran en la región de Moravia-Silesia.
«Esta despoblación es una tendencia permanente y también está relacionada con el hecho de que en esos territorios periféricos queda una población que está social y económicamente olvidada por el estado. Se solía decir que son regiones que eran una especie de carga estatal», afirma Jan Šimáček, de la Sección de Política Regional, Política de Vivienda e Inclusión Social del Ministerio de Desarrollo Regional.
El resultado de este olvido ya se ha puesto en manifiesto
La mayoría se van de las fronteras y se dirigen a Praga y sus alrededores. Sólo el año pasado se mudaron allí 13 000 personas. Pero cabe destacar que este aumento de población en Praga y sus alrededores también se debe al aumento de extranjeros. «La mayor parte del aumento de población se ha producido en los distritos administrativos de los municipios con jurisdicción ampliada en los alrededores de Praga: la región de Říč, Brandýs nad Labem, Stará Boleslav. Praga lleva mucho tiempo ganando habitantes procedentes sobre todo del extranjero», explica Pavel Hájek, jefe de los servicios de información de la Administración Regional de la Región de Bohemia Central. «Porque la vivienda en Praga no es asequible para todos, o no cumple los requisitos de calidad de la vivienda por eso muchas personas buscan las periferias», añadió el demógrafo Tomáš Kučera.
«Estamos preparando un plan para mejorar estas zonas, hacerlas más atractivas y mejorar su calidad residencial. Parte de ese apoyo es ayuda financiera y parte es también consultoría, es decir, ayudar a pensar cómo hacerlo para que la zona tenga algunas oportunidades atractivas en el ámbito del empleo, los servicios sociales, etc.», informó Šimáček.
En los lugares desde los que se desplaza la gente, suele florecer el comercio de la pobreza, en el que los propietarios alquilan propiedades a los socialmente vulnerables a precios considerablemente más altos.
Que las ciudades se están despoblando no es una sorpresa
El 2% de la población de Česká Lípa se ha marchado. Que algunas ciudades se están despoblando no es ninguna sorpresa. Especialmente en las zonas fronterizas, donde hay menos oportunidades laborales. Sin embargo, Česká Lípa es una sorpresa, ya que es uno de los asentamientos más grandes que, según la oficina de estadística,está experimentando una importante salida de habitantes. La localidad de la región de Liberec perdió casi el dos por ciento de su población.
A principios del pasado enero, Česká Lípa tenía una población de menos de 37 500 habitantes. A finales de año era de 36 800. Aproximadamente 1 900 personas se marcharon y menos de 1 300 se mudaron. Esto significa una pérdida de 621 habitantes. La alcaldesa Jana Volfová (ANO) ve dos posibles razones.
Los motivos de la pérdida de población
«Yo atribuiría la pérdida de población al hecho de que una empresa vinculada a la industria automovilística, que daba empleo, entre otros, a la comunidad mongola, va a cerrar. Esa comunidad contaba aquí con más de 2.000 personas en la ciudad», explicó.
El fabricante mundial de asientos para automóviles ha anunciado el cierre de la producción aquí, en Česká Lípa, y también en Stráž pod Ralskem. Ha despedido a 1 100 personas.
El alcalde dijo que la segunda razón por la que la ciudad perdió gente podría estar relacionada con la reintroducción de la tasa de residuos. Es posible que algunos residentes de Česká Lípa siguieran viviendo en la ciudad incluso después de mudarse, quizá para evitar pagar la tasa en otra ciudad. Y esto ha cambiado. Según la Oficina de Trabajo, la tasa de desempleo en Českolipsko es la más alta de toda la región de Liberec