Babiš responde con ironía a las críticas por “no aplaudir” en la ceremonia estatal
Praga. — Andrej Babiš, probable futuro primer ministro checo, volvió a ser el centro de atención durante la ceremonia de entrega de premios estatales en el Castillo de Praga. Su aparente falta de aplausos a los galardonados y su semblante cansado captados por las cámaras de la Televisión Checa desataron una oleada de comentarios y burlas en redes sociales.
El líder del movimiento ANO decidió reaccionar con un video publicado en Instagram, donde se defendió de manera sarcástica:
“Quería decirles que estoy en un gran aprieto. Según algunos medios, no aplaudí lo suficiente. Fue una coincidencia que las cámaras me captaran justo cuando no aplaudía. No es cierto que Monika me advirtiera que no estaba aplaudiendo”, dijo Babiš, visiblemente molesto por la polémica.
Aseguró que sí aplaudió, especialmente “al héroe de nueve años Šimon Malý, que salvó a su abuelo”, y a figuras como la tenista Martina Navrátilová, a quien dijo admirar profundamente. “La próxima vez aplaudiré de pie y quizá haga la ola mexicana”, ironizó el político.
También respondió a quienes afirmaron que parecía cansado durante la ceremonia:
“Sé que me veo ridículo, no soy Alain Delon. Algunos dicen que me parezco a un perro Chow-Chow, mírenlo, tiene las mismas arrugas que yo”, bromeó, mostrando la foto de un perro. “Alguien me dijo que me pusiera bótox, pero no lo haré. Estoy perfectamente bien”, agregó con humor.
Babiš aprovechó el video para enviar un mensaje desafiante a sus críticos:
“Vengan a Sokolovna, hagámonos un análisis de sangre y veamos quién tiene mejor edad metabólica. Trabajo duro para ustedes”, aseguró, recibiendo luego el apoyo de varios seguidores en redes sociales.
El episodio llega en un momento clave para el líder de ANO, que recientemente recibió el visto bueno del presidente para formar gobierno. Según analistas, el programa de la futura coalición —integrada por ANO, SPD y Automovilistas— no contempla grandes reformas estructurales.
“El documento no propone cambios profundos, solo ajustes menores como el regreso del sistema electrónico de ventas (EET) o modificaciones en las prestaciones sociales. Parece más bien teatro político”, opinó el politólogo Jiří Pehe.
Pehe también advirtió sobre la fragilidad de la coalición: “El SPD y los Automovilistas aprovecharon la necesidad que Babiš tenía de ellos para asegurar mayoría y evitar su extradición. Eso no es una base sólida para un gobierno estable”.
Mientras tanto, Babiš continúa acaparando titulares, entre bromas, sarcasmos y promesas de formar su gabinete antes de mediados de diciembre.
