Eurodiputado checo exige inspección inmediata a todos los KFC por sospechas de carne en mal estado
Praga. — El eurodiputado Tomáš Zdechovský ha solicitado al Gobierno checo una inspección inmediata y exhaustiva de todos los restaurantes KFC en el país, tras la publicación de graves acusaciones sobre la manipulación de carne y la alteración de fechas de caducidad en la cadena de comida rápida.
“¡La información sobre la venta a largo plazo de carne en mal estado es grave y podría poner en peligro la salud de la población checa!”, advirtió Zdechovský en una carta dirigida a los ministros de Agricultura y Sanidad. El eurodiputado pidió verificar auditorías internas, reforzar la transparencia y aplicar sanciones en caso de confirmarse irregularidades.
Investigación periodística
Las declaraciones llegan poco después de que el periodista Jan Tuna difundiera una serie de reportajes basados en grabaciones ocultas, testimonios de empleados y documentación interna de KFC. En ellos se denuncia el uso de carne caducada y la manipulación de etiquetas de fecha de consumo.
“Carne caducada en KFC en la República Checa. Fraude con la fecha de caducidad. Vídeos, fotos, testimonios. Estuvimos en el lugar”, anunció Tuna en redes sociales, recordando además que en Dinamarca todos los restaurantes KFC fueron clausurados por prácticas similares.
Según el periodista, la Comisión Europea también examinará el caso, lo que otorga una dimensión supranacional al escándalo.
Precedente en Dinamarca
El caso tiene resonancias del escándalo revelado recientemente por la televisión pública danesa DR. Allí, antiguos empleados denunciaron la práctica de “extender” la vida útil del pollo colocando etiquetas falsas. Tras una inspección, la Agencia Danesa de Inspección Alimentaria suspendió a todos los locales, lo que llevó a KFC a cerrar sus 11 restaurantes en el país y romper relaciones con el franquiciado.
“Nuestros estándares de seguridad alimentaria no son negociables”, declaró entonces la dirección europea de la cadena.
Expansión en riesgo
En la República Checa, KFC gestiona actualmente 135 restaurantes y abrió siete nuevas sucursales en 2024. La directora de la compañía para la República Checa y Austria, Ivana Makalová Dlouhá, aseguraba a principios de año que la marca seguía en expansión, ofreciendo “delicias de pollo jugosas y servicios de la mejor calidad”.
Sin embargo, el escándalo amenaza con afectar gravemente su reputación, justo en un mercado donde la competencia crece rápidamente con la llegada de cadenas como Popeyes y Five Guys. Según datos de la Cámara de Comercio, la comida rápida representa ya un 15 % de los establecimientos gastronómicos del país, con presencia cada vez mayor en zonas rurales.https://pragahoyservicios.com/automaticky-vytvoreny-koncept-68157/