En el programa Napřímo s Míša Indráková, el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Jan Bartošek (KDU-ČSL), se mostró tajante al analizar la postura de Andrej Babiš, líder del movimiento ANO. Comentó el reciente acuerdo de la OTAN sobre el aumento del gasto en defensa y subrayó la incoherencia de Babiš respecto a temas clave como la migración y la política exterior.
Durante la cumbre de la OTAN celebrada en La Haya, los países miembros acordaron aumentar el gasto en defensa hasta el 5 % del PIB. Sin embargo, Andrej Babiš adelantó que, si regresa al poder como primer ministro, no cumplirá con ese compromiso. “Con Babiš todo es posible”, ironizó Bartošek.
Recordó también que durante la campaña presidencial, Babiš afirmó que no enviaría al ejército checo a defender a un país aliado como Polonia en caso de invasión. “Está traicionando a nuestros socios. Dice claramente: ‚Acordasteis algo, pero a mí no me importa’”, denunció.
¿Cinco por ciento para defensa? No solo para tanques
Bartošek explicó que del 5 % del PIB destinado a defensa, el 3,5 % iría directamente al ejército y el 1,5 % a áreas relacionadas con la seguridad nacional, como la policía, infraestructuras estratégicas y reservas estatales.
De dar la bienvenida a los refugiados… al rechazo absoluto
El líder popular también recordó que Babiš ha cambiado radicalmente su discurso sobre la migración. “Hay grabaciones en las que da la bienvenida a los inmigrantes, dice que cubrirán vacantes en fábricas, y ahora los rechaza con vehemencia”, afirmó Bartošek.
En 2015, Babiš declaró: “Tenemos 18.000 vacantes para trabajadores auxiliares. Si nuestros ciudadanos no quieren esos trabajos, ¿por qué no [darles a los refugiados esa oportunidad]?”. A pesar de ello, siempre se opuso a las cuotas obligatorias de reubicación.
Babiš quiere una OTAN ofensiva
En su libro Lo que sueño cuando me duermo por casualidad, Babiš propone transformar la OTAN de un pacto defensivo en una alianza ofensiva. “La Alianza debería haber actuado en la crisis migratoria, atacando a traficantes de personas y hundiendo barcos vacíos en el Mediterráneo”, escribió.
Según Bartošek, estas ideas son “un disparate total” y ponen en evidencia la volatilidad del líder de ANO. Además, criticó su falta de acción concreta: “Prometió una reforma de las pensiones y no presentó nada. El mayor enemigo de ANO es el propio ANO”.
Conclusión: un socio imprevisible
Bartošek cerró la entrevista con un mensaje claro: “Babiš es imprevisible, es peligroso. Nadie sabe lo que hará después de las elecciones. Por eso no podemos gobernar con él, ni siquiera ante la amenaza de un gobierno con extremistas”.