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Okamura

Previsión de crecimiento del PIB a la baja

El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) ha vuelto a reducir las perspectivas de crecimiento de la economía checa, principalmente debido a la situación económica de Alemania. El BERD prevé que el producto interno bruto (PIB) crezca un 1,6 % este año, por debajo del 1,9 % estimado en febrero. Para el próximo año, el crecimiento se proyecta en 2,2 %, dos décimas menos de lo previsto anteriormente.

En conjunto, el crecimiento acumulado en todas las regiones donde opera el BERD alcanzará el 3 % este año, lo que representa una reducción de dos décimas con respecto a las previsiones de febrero. Para 2026, el pronóstico se mantiene en 3,4 %.

Contexto económico y vínculos con Alemania

En 2024, la economía checa creció un 1,1 %, revirtiendo la contracción del 0,1 % registrada el año anterior. Esta recuperación fue impulsada por el consumo y las exportaciones, mientras que la caída de la inversión y la reducción de existencias tuvieron un impacto negativo.

La primavera pasada, el BERD había previsto un crecimiento del 2,5 % para este año. En septiembre ajustó la cifra al 2,4 %, y en febrero a 1,9 %, hasta llegar a la actual previsión del 1,6 %.

Según el banco, la economía checa está altamente entrelazada con Alemania, ya que el 60 % de sus exportaciones están concentradas en sectores como el automóvil, la electrónica y los metales. Por otro lado  (CZSO) publico los datos exactos sobre la inflación en el mes de abril.

Según la estimación preliminar, la inflación se vio impulsada principalmente por los precios de la energía y los carburantes, que cayeron un 6,3% interanual. En comparación con marzo, el precio de los alimentos, el alcohol y el tabaco se ralentizó, con una subida interanual del 3,3%, frente al 5,9% de marzo. Persistió la inflación elevada en los servicios, cuyos precios aumentaron un 4,7%.
La ralentización de la inflación fue más pronunciada de lo que esperaban los analistas, debido sobre todo al menor crecimiento de los precios de los alimentos, pero los expertos también advirtieron de que, aunque la inflación había caído por debajo del objetivo del 2 por ciento del Banco Nacional Checo (BNCh), no podía decirse que hubiera sido una victoria definitiva sobre él, ya que el descenso estuvo impulsado por artículos propensos a rápidas fluctuaciones de precios. Además, según los analistas, existen incertidumbres sobre el futuro impacto de la política arancelaria estadounidense en el nivel de precios en Europa y la República Checa.

Inflación: desaceleración en abril

La Oficina Checa de Estadística (CZSO) publicará hoy el dato final de inflación correspondiente al mes de abril. Según la estimación preliminar, los precios al consumo aumentaron un 1,8 % interanual, frente al 2,7 % registrado en marzo. En comparación con marzo, los precios bajaron un 0,1 %.

Este nivel de inflación representa la cifra más baja desde marzo de 2018, según informó la agencia de prensa ČTK. En meses anteriores, la CZSO ha confirmado sus estimaciones preliminares, y los analistas esperan que ocurra lo mismo esta vez.

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