Cerveza checa en Alemania: fiebre por la Pilsner Urquell a 18 coronas Una reciente promoción en Alemania ha despertado una auténtica euforia cervecera entre los consumidores checos. La venta de Pilsner Urquell embotellada a un precio sorprendentemente bajo —18 coronas checas por unidad— provocó que muchos praguenses y residentes de zonas cercanas cruzaran la frontera para aprovechar la oferta.
Compras transfronterizas: una práctica común entre checos
Viajar a Alemania para hacer compras no es una novedad. Muchas personas de Praga visitan regularmente ciudades como Dresde, accesible en solo hora y media en coche o dos horas en tren, aprovechando precios más bajos en varios productos. Esta vez, sin embargo, el motivo del viaje fue concreto: una promoción de cerveza en el supermercado Kaufland.
Un lector alertó al equipo editorial sobre una oferta publicada en el folleto de Kaufland: una caja de 20 cervezas Pilsner Urquell por 13,99 euros, lo que equivale, según el tipo de cambio vigente (16 de abril de 2025), a aproximadamente 363 coronas checas. Esto sitúa el precio unitario en 18 CZK por botella, una cifra impensable en la República Checa, donde incluso en oferta rara vez baja de las 25,90 coronas.
Fiebre cervecera y reventa informal
La oferta solo estuvo vigente por un día, y la cerveza se agotó rápidamente. Según testimonios, la gente llenaba sus carritos con varias cajas. Aunque predominaban los compradores checos, también alemanes y comerciantes vietnamitas aprovecharon la promoción.
«Estuve en Dresde, en el Kaufland, y me llevé cuatro cajas. También vi muchos vendedores vietnamitas que luego revenden la cerveza a precios mucho más altos en sus pensiones», relató una lectora desde Teplice.
Durante la visita a otros supermercados alemanes como Lidl, se repitió la escena: clientes —en su mayoría vietnamitas— comprando grandes cantidades de aceite, leche, papel higiénico y artículos de droguería, todos con descuentos notables frente a los precios checos. «Más barato que aquí», comentó un hombre cargando fardos de papel higiénico en su furgoneta.
¿Misma cerveza, distinto precio?
A pesar de los rumores que circularon en redes sociales el año pasado, donde se afirmaba que la Pilsner Urquell vendida en Alemania era de menor calidad, la compañía lo desmintió rotundamente:
«La receta de Pilsner Urquell es idéntica en todos los mercados. Se produce y embotella exclusivamente en Pilsen y se exporta desde allí a más de 50 países», afirmó un portavoz oficial.
Una llamada telefónica a la tienda Kaufland de Dresde confirmó el enorme interés por la cerveza checa, que continúa siendo un símbolo nacional y un producto altamente valorado tanto dentro como fuera del país.
Esta situación refleja no solo la pasión checa por su cerveza, sino también el impacto de las diferencias de precio en un contexto de alta inflación y búsqueda de ahorro, donde cruzar la frontera puede representar un respiro para el bolsillo.