Praga – El Partido Pirata, actualmente en la oposición, ha presentado su estrategia postelectoral, en la que descarta toda posibilidad de cooperación con el movimiento ANO, los Motoristas por Nosotros Mismos, Libertad y Democracia Directa (SPD), Stačilo! y el Partido Comunista. Así lo comunicó hoy la formación en una nota de prensa.
Piratas checos rechazan cooperación con partidos prorrusos y antieuropeos
Según el comunicado, los Piratas solo considerarán la entrada en un futuro gobierno con socios democráticos que compartan sus valores fundamentales y garanticen la implementación de un programa común. Tras las últimas elecciones, los Piratas formaron inicialmente una coalición gubernamental junto con los Alcaldes e Independientes (STAN) y la alianza Juntos (integrada por ODS, KDU-ČSL y TOP 09).
La estrategia postelectoral, que ha sido una práctica constante del partido, seguirá siendo vinculante también para las elecciones a la Cámara de Diputados que se celebrarán este octubre. El partido justifica su rechazo a ANO, SPD, Stačilo!, los Motoristas y los comunistas por su historial de corrupción, posturas extremistas, amenazas a la pertenencia de Chequia a la Unión Europea y a la OTAN, así como por su difusión de propaganda rusa.
Los Piratas solo negociarán con partidos democráticos tras las elecciones de octubre
“Negociaremos tras las elecciones con todos los partidos democráticos que respeten el Estado de derecho, la orientación europea del país y los principios fundamentales de la democracia liberal. Queremos que los votantes sepan qué pueden esperar de nosotros. Jugamos con las cartas abiertas y estamos preparados para defender los intereses de los ciudadanos tanto desde el gobierno como desde la oposición”, declaró Zdeněk Hřib, presidente del Partido Pirata.
Entre las prioridades que los Piratas llevarán a cualquier negociación figuran la modernización del Estado, el apoyo a las familias, el acceso a la vivienda, la lucha decidida contra la corrupción y la garantía de seguridad para la República Checa dentro de los valores europeos y democráticos. “Nuestro apoyo a cualquier gobierno estará condicionado a que no incluya personas con antecedentes de corrupción, individuos que socaven el Estado de derecho o propagadores de narrativas prorrusas que debiliten las defensas del país”, añadió Hřib.
En los anteriores comicios, los Piratas se presentaron en coalición con STAN y, tras el escrutinio, pactaron un gobierno junto a la alianza Juntos. Sin embargo, abandonaron el gabinete hace menos de un año, cuando el primer ministro Petr Fiala (ODS) propuso destituir al entonces líder pirata y viceprimer ministro Ivan Bartoš como ministro de Desarrollo Regional, debido a problemas con la digitalización de los procedimientos de construcción.
En las encuestas recientes, el apoyo a la coalición de los Piratas y los Verdes ronda el 8 %. Aunque los Piratas han criticado duramente la gestión de ODS desde su salida del gobierno, el primer ministro Fiala no descartó una posible cooperación futura. En una entrevista concedida a Blesk.cz la semana pasada, declaró: “No tengo ningún problema en dejar atrás todo esto, olvidar los ataques personales y volver a dialogar con el Partido Pirata. Pero es necesario que ambas partes estén dispuestas”.